Fotograma de Call of Duty: Modern Warfare III – ACTIVISION
MADRID, diez Nov. (Portaltic/EP) –
Call of Duty ha anunciado una nueva actualización de su sistema antifraude Ricochet, que desactiva de manera automática el paracaídas de los jugadores que hagan trampas a fin de que desciendan en picado al principio de la partida o se acreciente la velocidad de caída si ya lo han desplegado.
Esta característica, que recibe el nombre de Splat, prueba los nuevos avances en aprendizaje automático en los que ha trabajado la desarrolladora del juego de cara al lanzamiento de Call of Duty: Modern Warfare III.
«El aprendizaje automático nos ayuda a anticipar mejor el comportamiento y operar con más eficacia», han reconocido los responsables de este título, desarrollado por Activision, que han explicado en qué consiste Splat en un comunicado.
Con este truco, si se descubre a un tramposo, se activa «aleatoriamente y por diversión» su paracaídas, para mandarlo a toda velocidad cara el suelo una vez que se despliegue, ha dicho.
En el caso de que se advierta al tramposo una vez haya abierto este aparato, se puede ajustar la velocidad del jugador, a fin de que caiga más veloz, lo que «lo elimina instantáneamente».
Como otras de las medidas antifraude, Splat no se activará de forma azarosa para un jugador que no haya sido identificado y marcado como tramposo, pese a haber recibido informes de una parte de otros jugadores que indiquen que ha hecho trampas.
La desarrolladora ha señalado por último que este «es uno de los muchos trucos nuevos» que ha desarrollado y que irá dando a conocer otras medidas afines próximamente.
DESPUÉS DE CLOACKING Y QUICKSAND
La desarrolladora ha introducido esta característica meses tras probar con otras medidas de seguridad que favorecen el juego limpio, como es el caso de los conocidos como ‘Cloaking’, ‘Damage Shield’ y ‘Quicksand’.
El ‘Cloaking’, una actualización del sistema antifraude Ricochet, consiste en encubrir a los contrincantes de aquellos jugadores que hacen trampas a lo largo de las partidas. De esa forma, los personajes, las balas y el sonido de los jugadores lícitos se vuelven inapreciables para los tramposos.
‘Damage Shield’, por su lado, resguarda a los jugadores lícitos y les entrega una ventaja en combate en frente de sus contrincantes, por lo que cuando advierte un tramposo en acción en tiempo real, desactiva su capacidad de producir daño al resto de jugadores.
‘Quicksand’, en cambio, se desechó por el hecho de que «podía ser visualmente discordante» aun para jugadores que no hiciesen trampas, tal como reconocío la compañía. Se trataba de una mitigación que ralentizaba o congelaba el movimiento de los tramposos detectados en el juego, lo que les transformaba en blancos fáciles.