Max Verstappen tenía ganas de correr. En verdad, su equipo, fue uno de los tres que deseaba competir en el GP de Australia a pesar del caso positivo de un empleado de McLaren por coronavirus. Y el día de ayer se quitó el ‘mono’ corriendo de forma virtual, en la carrera de simulación (Sim Racing) organizada por The Race en la que participaron cada uno de ellos desde su casa, recluídos por el coronavirus, otros pilotos como Juan Pablo Montoya, Pagenaud o el catalán Juncadella.
Max, enamorado de esta clase de citas, se impuso en su conjunto inicial, mas padeció un accidente en una ‘melé’ organizada en la salida, por lo que solo pudo ser 11º, al paso que Dani Juncadella terminó 14º